Cuando la ciencia se sirve en plato
En el restaurante L’Àtic, la noche del pasado viernes todo tenía aspecto de jornada convencional: mesas puestas, platos que llegan, copas que tintinean… Pero, si uno prestaba atención, se daba cuenta de que había algo más: en todas las mesas, se sucedían charlas amenas con el foco puesto en la persona sentada en la cabecera de la mesa… ¿un científico? La receta formaba parte de la Nit Europea de la Divulgació, una iniciativa de la Universitat de les Illes Balears, que, gracias al programa Horizonte Europa de la UE, que dejó en manos de Chefs(in) la organización Degusta la Ciència, un menú único de ciencia, gastronomía, música y cine. El evento se desarrolló tal que así: ocho científicos ofrecieron ocho charlas de cinco minutos sobre el medio ambiente y el cambio climático, todas ellas relacionadas con ocho películas sobre el tema, ambientadas por ocho bandas sonoras compuestas para la ocasión, y ocho platos creados e inspirados en cada película y charla.
Degusta la Ciència fue uno de los experimentos organizados para celebrar la investigación y, sobre todo, hacer llegar la ciencia a todos los públicos posibles, En él los chefs(in), Juan Pinel, anfitrión y chef de l’Àtic, y Ariadna Salvador ,chef de Ninumá, convirtieron la mesa en un laboratorio para transformar ciencia en bocados. La imaginación en su espectro más amplio y, sobre todo, sabroso.
Tras cada mini charla, los ocho científicos de la UIB compartían mesa con los asistentes y, entre bocados y sorbos, hablaban de cambio climático, innovación y futuro. Todo en un formato dinámico y cercano, envueltos por la música del pianista de jazz y miembro de, entre otros, K12, Gori Matas, y Carlos Medina saxafonista y parte de Big Babo. Junto con la película que acompañaba la investigación, tejían una atmósfera que unía ciencia y banda sonora.
Cada una de estas ideas encontraba su eco en la propuesta de los chefs(in), subrayando que la creatividad no entiende de fronteras: la ciencia se puede saborar y la gastronomía convertirse en relato.

Los protagonistas, el tema, las películas y música, esto fue lo que se sirvió
Pau de Vílchez – El canvi climàtic als tribunals
Película: No mires arriba,
Entrante: Dumpling negre
Banda sonora: Aquí hi ha alguna cosa amagada
Biel Jordà – Física de l’oceà
Película: El día de mañana
Entrante: Sorbet de gred i gelada
Banda sonora: Notes a molt baixa temperatura
Elena Baraza – Ecosistemes terrestres
Película: Marte (The Martian)
Entrante: Mossegades de patata del planeta vermell
Banda sonora: Un paisatge de Mart
Núria Marbà – Ecosistemes marins
Película: Buscando a Nemo
Entrante: Esponges sobre la mar blava
Banda sonora: En algun lloc davall la mar
Enrique Moran – Desertificació
Película: Las uvas de la ira
Entrante: El cuscús del desert és saborós
Banda sonora: A la Vall del Riu vermell també hi tocaven jazz
Ivan Murray – Metabolisme socioeconòmic / economia ecològica
Película: Snowpiercer
Entrante: Un royale amb poll de patata
Banda sonora: En tren
Cels García – Recursos hídrics
Película: Erin Brockovich
Entrante: Mossegada dolça amb xocolata negra
Banda sonora: Amb ànima de punk aquàtic
Daniel Argüeso – Física de l’atmosfera
Película: No mires arriba
Entrante: Bombó meteorit
Banda sonora: L’apocalipsi també és una comèdia

Gracias al motor principal de esta iniciativa, El Vicerrectorat de Divulgació i Cultura de la Universitat de les Illes Balears y el programa Horizonte Europa de la Unión Europea, por apostar por este formato y creer que la ciencia, la gastronomía, la música y el cine pueden ir de la mano. Y, por supuesto, al resto de cómplices L’Àtic del Hotel Saratoga por acogernos y poner su profesionalidad, a los músicos por dejarse llevar sin filtros. Y por supuesto, a Juan y Ariadna por responder sí y querer jugar con todas las ganas en todas nuestras propuestas. Además de Begudes Puig. Y a todos los y las que os prestáis a venir de aventuras con nosotros. Esto hay que repetirlo. Sigan atentos a sus pantallas.
En chefs(in) creemos que la mesa puede ser un espacio de encuentro donde la ciencia o cualquier tema, hace que la sociedad se acerque de forma más natural, conversando, compartiendo y disfrutando. Porque, al final, la mesa tiene ese poder, unir mundos distintos en un mismo lenguaje, el de disfrute.